El amor de Dios es la mayor locura de la historia
Hay algo que jamás lograremos entender ni en esta vida ni en la eternidad, y es el por qué Dios decidió complicarse su existencia creándonos. Cuando alguien crea o inventa […]
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Hay algo que jamás lograremos entender ni en esta vida ni en la eternidad, y es el por qué Dios decidió complicarse su existencia creándonos. Cuando alguien crea o inventa […]
Hay algo que jamás lograremos entender ni en esta vida ni en la eternidad, y es el por qué Dios decidió complicarse su existencia creándonos. Cuando alguien crea o inventa una cosa es porque existe una necesidad, y tal invento pretende satisfacerla: Necesitábamos comunicarnos e inventamos el teléfono, necesitábamos movilizarnos e inventamos los medios de transporte… Pero ¿Qué necesidad existía en Dios para crearnos? ¿Qué podíamos nosotros, seres limitados, aportarle a alguien que es perfecto, que se basta a sí mismo y que es plenamente feliz en sí mismo? ABSOLUTAMENTE NADA.
El ser humano es a la vez el invento más inútil de la historia, pero también el único invento por amor desinteresado. Y es que no existe otra razón de nuestra existencia que el simple hecho que Dios quería compartir su plenitud y felicidad. Dios es amor, y tan colmado de él que no puede menos que rebalsar, y hemos sido creados para que ese amor sea derramado en nosotros.
Si nos ayuda para darnos una idea, imaginémonos a nosotros mismos parados al pie de una represa, y que esta se rompe frente a nosotros, y que somos arrollados por esa descomunal cantidad de agua; pues esto es solo una caricatura en comparación a el amor que Dios nos tiene. Absolutamente nada de lo que Dios ha hecho a lo largo de la historia tiene sentido, la única explicación posible es el Amor.
Ya vimos que no había ninguna necesidad para crearnos, pero tampoco para hacer alianzas con los hombres, no había necesidad de que se hiciera uno de nosotros, tampoco era necesario que muriera por nosotros. Muchas veces se nos ha mentido diciéndonos que era necesario que el Hijo de Dios muriera para reparar la deuda de la humanidad contraída por nuestros primeros padres, pero es falso, no era necesario. Si alguien se endeuda contigo y no puede pagarte, supongamos que te debe $1,000, no es necesario que le prestes otros $1,000 para que pueda pagarte la deuda inicial, basta que le digas que le absuelves su deuda.
Sin embargo Dios, en su lógica del Amor, hizo exactamente eso: Habiendo quedado rota la relación entre Dios y los hombres, contrajimos una deuda infinita pues nos enemistamos con quien es infinito; pero Él, dado que no podíamos pagarle, se hizo hombre sin dejar de ser Dios para que los hombres tuviéramos el modo de pagar ese precio infinito. La pregunta es ¿Por qué? si bastaba con que nos perdonara y todo quedaba solucionado. Si has leído hasta aquí, quienquiera que seas, esto es lo único que me importa que te quede claro y que quiero que te lleves: Que la razón por la que Dios ha hecho lo que ha hecho a lo largo de los Siglos, como morir en una cruz cuando era absolutamente innecesario, ES PORQUE NO QUIERE QUE JAMÁS SE TE PASE POR LA CABEZA LA DUDA DE SI DE VERDAD TE AMA, ES PORQUE ESTÁ DISPUESTO A HACER LO QUE SEA CON TAL QUE TE LO CREAS, ES PORQUE HA QUERIDO LLAMAR TU ATENCIÓN Y GRITARTE CON SUS ACTOS QUE SI EXISTES ES ÚNICAMENTE PORQUE QUIERE AMARTE Y HACERTE FELIZ. Y tú, ¿Te dejarás amar?
Artículo escrito por nuestro colaborador y católico con acción Tony Guzmán.
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si…
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